viernes, 20 de abril de 2012

Revoluciones Pacíficas - Retrospectiva y opinión de la actualidad

Con todo esto de la primavera árabe, los movimientos pacíficos, los indignados... me gustaría volver atrás, mirar al pasado, e intentar como adivino, atisbar hacia dónde nos van a conducir, ya que está comprobado que la historia, muy a pesar nuestro, tiende a repetirse. Para ello quisiera citar un fragmento del libro "El siglo del Viento" de Galeano.

Os pongo un poco en antecedentes.

Las compañías privadas chilenas (de origen inglés, alemanas y estadounidenses) encargadas de explotar las bastas extensiones de salitre del desierto de Atacama (utilizado como fertilizante para revivir las agotadas tierras europeas que ya no podían producir por la sobreexplotación a la que habían sido sometidas durante el origen de los tiempo, además de la fabricación de ácidos, dinamita, explosivos... entre otros usos) se negaban a ceder el control de dichos recursos a sus legítimos propietarios (el pueblo chileno, boliviano y peruano).

Los explotados trabajadores de tan lucrativo negocio en manos de capitales privados, deciden convocar una revolución pacífica a fin de reclamar la soberanía de tan valioso recurso y deciden ocupar pacíficamente la ciudad de Iquique (Chile).
La maquinaria del capital privado se pone en marcha, y tirando de los hilos necesarios responde a tal agravio provocativo tal y como nos relata Galeano:

"Banderas de varios países encabezan la marcha de los obreros del salitre, a través del cascajoso desierto del norte de Chile. Miles de obreros en huelga y miles de mujeres y niños caminan hacia el puerto de Iquique, coreando consignas y canciones.
Cuando los obreros ocupan Iquique, el ministro del Interior dicta orden de matar. Los obreros, en continua asamblea, deciden aguantar a pie firme y sin arrojar ni una piedra. [...]
El cónsul del Perú intenta llevarse a los obreros peruanos. Los obreros peruanos no abandonan a sus compañeros chilenos. El cónsul de Bolivia quiere salvar a los obreros bolivianos. Los obreros bolivianos dicen: - Con los chilenos vivimos, con los chilenos morimos.


 Las ametralladoras y los fusiles del general Roberto Silva Renard barren a los huelguistas desarmados y dejan el tendal.












El ministro Rafael Sotomayor justifica la carnicería en nombre de las cosas más sagragadas, que son, en orden de importancia: la propiedad, el orden público y la vida. "




Mi intención no es desanimar a nadie ni ser pájaro de mal agüero, pero las mayores revoluciones de la historia se han logrado con la violencia como medio.  Los que tienen el poder se ríen del pacifismo. Les facilita el control y el abuso de él, ya que por todos es bien conocido, que quien tiene la sartén por el mango no va a renunciar a su posición de cocinero para pasar a ser un mero pinche.

Si alguien me preguntara en qué creo que van a terminar todos estos movimientos sociales no violentos que tan en auge están ahora como flora en la primavera de los albores de este s.XXI le contestaría, basándome en mi escaso conocimiento histórico y psicológico humano, que no van a terminar en nada, salvo en la muerte de algún que otro incauto inocente que estuvo en el sitio equivocado en un momento poco oportuno.

Mientras, seguiré aquí en mi zulo esperando ver cómo evoluciona todo esto de YPF, el gobierno Argentino y la desUnión Europea. Comienza la segunda época dorada de las Américas con este Neo Colonialismo Burocrático y Diplomático. 

¡¡Viva América Latina Libre de capitales privados e intereses y ambiciones personales!!


Y tu ¿Qué opinas?